Los Beneficios de la Natación Tras Cirugía de Mama

¿Puedo hacer Natación tras una Mastectomía?

La respuesta es rotundamente “si”, dado que es una forma muy suave de realizar ejercicio.  Hacer natación tras una cirugía de mama es una excelente manera de ejercitar todos los grupos principales de musculatura y  a su vez evitar la atrofia muscula, que en ocasiones surge en los pacientes post-quirúrgicos que permanecen sedentarios durante un tiempo prolongado.

Cuando tu médico te indica que ya puedes comenzar a realizar ejercicio moderado, la natación es una buena forma de comenzar.  Muchos médicos y expertos en la natación lo avalan como una de las maneras más seguras y cómodas de volver a realizar ejercicio.

"Uno de los grandes beneficios de la natación proviene de la flotabilidad mágica del agua.  No hay presión ni tensión en los músculos ni en las articulaciones", dice Jane Katz, Ed.D., profesora de salud y educación física en el John Jay College de la Universidad de Nueva York. El agua también ejerce un efecto de enfriamiento, que mantiene la temperatura corporal baja durante todo el entrenamiento. Esto es especialmente importante para las mujeres que pueden estar experimentando sofocos asociados con la quimioterapia o de forma natural por la menopausia.

La natación fortalece los músculos y quema calorías

Después de la cirugía de mama, es probable que tu centro de gravedad sea ligeramente diferente y tendrás que aprender a buscar tu nueva postura. La natación fortalece el abdomen, la espalda y los hombros, contribuyendo a llevar con más facilidad tu estructura corporal, reduciendo la probabilidad de molestias en la espalda. Tener músculos más fuertes y tonificados, especialmente los músculos abdominales, los hombros y del pecho, facilitan la recuperación de la cirugía mamaria. También se obtiene grandes beneficios cardiovasculares.  Cada vez que nades a un ritmo rápido y constante, mejorará tu condición cardíaca - el músculo más importante de tu cuerpo.

Quema calorías es excelente para combatir el aumento de peso post-quimioterapia que algunas mujeres experimentan.  Sin embargo, para muchas mujeres, los deportes de alto impacto como el correr pueden ser incómodos, e incluso arriesgado si te caes. 

Por otro lado, los ejercicios de natación y agua, pueden ayudarte a hacer ejercicio con suavidad y seguridad con el objetivo de quemar calorías. A diferencia del tenis o de otros deportes competitivos, puedes nadar en solitario, a tu propio ritmo y puedes parar cuando te sientas cansada.

5 consejos sobre la natación tras cirugía de cáncer de mama:

• No debes realizar más de 20 minutos de cualquier estilo. El nado estilo “perrito” ejercita la parte superior del cuerpo . El estilo “braza” es una opción relajante, útil para tonificar y estirar los músculos de las piernas. El nado estilo “espalda” ayuda a fortalecer los músculos de la espalda.  El estilo “crol” lateral puede funcionar bien después de una mastectomía lateral (trabajando con el brazo opuesto). No recomendamos el estilo “mariposa” dado que es muy extenuante y requiere arquear la espalda.
• Siempre se debe realizar cómo mínimo 5 minutos de estiramientos tanto de calentamiento como de enfriamiento. Esto se pueden realizar tanto dentro como fuera de la piscina. Puedes sentarte en el borde de la piscina y patalear el agua o estirar los músculos de la pantorrilla. Para ayudar a tu cuerpo adaptarse al agua, puedes caminar de forma lenta o correr dentro del agua. Debes evitar  extenuar demasiado la zona quirúrgica.
• No te sobrecalientes. Los cambios en su cuerpo pueden hacer que sea menos adaptable al calor, así que siempre tenga cuidado.  Si vives en un clima cálido y nada al aire libre, es mejor nadar temprano por la mañana o más tarde en el día para evitar el horario  más caluroso del día. Asegúrate de beber agua antes y después de nadar.
• No te excedas. Si te sientes cansada, debes parar. Debes estar relajada, no agotada. Ahora no es el momento de acelerar tu ritmo cardíaco.
• Antes de comenzar este, o cualquier programa de ejercicios, consulte siempre con tu médico. Si no eres una nadadora habitual, no empieces ahora con 50 vueltas de braza. En su lugar, intente ejercicios suaves de agua, como círculos de brazos y flexiones en la pared, que te aportará muchos de los mismos beneficios.

¿Puedo utilizar un traje de baño habitual?

De nuevo, la respuesta es sí. Si has tenido cirugía reconstructiva, tu traje de baño debe todavía caber y aportar soporte para  tus pechos mientras que nades.

 Si llevas una prótesis de mama externa, existe una gran diversidad de trajes de baño con bolsillos disponibles tan bonitos como a los que estás acostumbrada.

Estos bañadores están diseñados para albergar una prótesis de mama de silicona, o incluso mejor, una prótesis especialmente hecha para la natación, como Aqua Wave. 

El cloro y el agua salada no dañarán la prótesis, pero debes asegurarte de enjuagarlo (y tu traje de baño) con agua dulce después de nadar. Si se deja la prótesis sin lavar, el cloro y la sal descompondrán la silicona.

¿Qué sucede con la bañera de hidromasaje, sauna o hammam?

Muchas mujeres nos preguntan si se pueden sumergir en bañeras de hidromasaje y saunas con sus prótesis de mama. Estas son nuestras recomendaciones:

• La temperatura máxima a la que se puede someter una prótesis de mama con seguridad es de 60 °C (140 ° F). Es importante informarse previamente sobre la temperatura del agua antes de sumergirte en una bañera de hidromasaje o sauna. 
• La temperatura habitual del Hammam es de aproximadamente 50°C (122°F), siendo una temperatura aceptable para una prótesis de mama, incluso para Aqua Wave.
• Debes evitar los baños de azufre, dado que la prótesis de mama absorberá el olor y el color. 
• Aqua Wave es muy recomendable para la natación y el spa.